Herramientas del Arte

Un proyecto de Álvaro de los Ángeles
# Daniel García Andújar
# Rogelio López Cuenca
# Isidoro Valcárcel Medina

Artistas contra el arte

Herramientas del arte
Babelia
VICENTE JARQUE 02/08/2008

Bastantes artistas siguen, casi al pie de la letra, la constataciÃ³n hegeliana de que, en la era de la ciencia, por no hablar de las nuevas tecnologÃas, lo que hasta la fecha hemos venido designando como “arte” es “una cosa del pasado”. Esto es evidente, pero no por ello deberÃa ser difÃcil asimilar lo que significa: que el arte debe incorporar la reflexiÃ³n y, por ende, el pensamiento, la autoconciencia… sin necesidad de suicidarse.

Estas consideraciones de orden filosÃ³fico vienen a cuento de una exposiciÃ³n ciertamente interesante. Su comisario, Ãlvaro de los Ãngeles, hasta hace poco director del combativo -y ejemplar- Espai d’Art Contemporani de CastellÃ³, ha reunido a tres artistas espaÃ±oles igualmente combativos de tres generaciones como lo son las de Isidoro ValcÃ¡rcel Medina, Rogelio LÃ³pez Cuenca y Daniel GarcÃa AndÃºjar. El tema es la relaciÃ³n del arte con las instituciones (incluida la que gobierna el PP, en la que tiene lugar esta exposiciÃ³n) y su mala conciencia.

El primero (Murcia, 1937, premio Nacional de Artes PlÃ¡sticas 2007) es, acaso a su pesar, una autÃ©ntica instituciÃ³n, casi una leyenda en el mundo del arte antiinstitucional. De hecho, ValcÃ¡rcel Medina lleva aÃ±os desarrollando una suerte de arte conceptual que algunos consideran enemigo del arte no conceptual. Por fortuna, esto lo ha venido haciendo con inteligencia y honestidad, y con el necesario sentido del humor sin el cual estas cosas no valen la pena. En esta ocasiÃ³n, su contribuciÃ³n consiste en una serie de estanterÃas con cajas de cartÃ³n vacÃas, etiquetadas con el nombre de museos o centros de arte espaÃ±oles, y acompaÃ±adas de una carta en la que se pide a esas instituciones que colaboren a su financiaciÃ³n enviando seis euros a cuenta de la instituciÃ³n en donde se exponen. Son pocas las que han respondido. No se entiende, porque la verdad es que seis euros no es mucho. ValcÃ¡rcel Medina siempre ha estado del lado de un arte que no sea ni caro ni barato: un arte al margen del mercado. Obviamente, esto es bueno -como idea-, pero no es negocio.

Rogelio LÃ³pez Cuenca (Nerja, MÃ¡laga, 1959) se ha distinguido por sus preocupaciones por la relaciÃ³n entre el arte y la realidad social y polÃtica, sirviÃ©ndose de imÃ¡genes y objetos vinculados a la publicidad y al comercio, pero dando una vuelta de tuerca y presentÃ¡ndolos en tÃ©rminos crÃticos. Lo mÃ¡s interesante de su trabajo es la manera paradÃ³jicamente mimÃ©tica en que se empeÃ±a en combatir la brillantez formal de las imÃ¡genes y objetos de los que vive el capitalismo. En esta exposiciÃ³n ha intervenido -junto a GarcÃa AndÃºjar- seleccionando fotografÃas y vÃdeos, documentos vinculados a los aspectos mÃ¡s institucionales del arte. Hay fotos de inauguraciones de exposiciones, o de interiores en donde aparece el arte asociado a polÃticos y majestades: don Juan Carlos, doÃ±a SofÃa, GonzÃ¡lez, Zapatero, Aznar y seÃ±ora… y creo que el propio Goebbels (Ã©ste en blanco y negro).

En cuanto a Daniel GarcÃa AndÃºjar (AlmoradÃ, Alicante, 1966), es un ejemplo eminente de eso que se llama artivista. Su trabajo se funda en las nuevas tecnologÃas (Technologies to the People, TTTP, fue idea suya) y en la convicciÃ³n de que el arte debe contribuir a la democratizaciÃ³n del mundo atacando las jerarquÃas dominantes. Hay quien piensa que sus portales en internet forman parte de su arte, como sus conferencias. Yo tambiÃ©n lo creo.

Lo peor de esta exposiciÃ³n, aparte de las absurdas postales de desnudos femeninos, son las inÃºtiles fotocopias de textos de Max Weber, LÃ©vy-Strauss, Bourdieu, Badiou o Enzensberger, etcÃ©tera, con las que se intenta ilustrar al visitante. Y lo mejor: ese librillo sobre una mesa que es un manual de declaraciÃ³n de renta para artistas. Porque una cosa es pasar del mercado y otra no pagar impuestos. En definitiva, y teniendo en cuenta que, segÃºn el comisario, el artista contemporÃ¡neo (necesariamente visual, no se sabe por quÃ©) es “un artesano de ideas”, harÃa bien preocupÃ¡ndose por el destino de los autÃ³nomos. Aunque no creo que -despuÃ©s de tantos siglos de ciencia y de filosofÃa- las buenas ideas sean cosa principal de la artesanÃa… artÃstica.

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